Los cuatro entraron vestidos de traje en la plaza en la que se tomarían las uvas. Tryp Bates, Shawn Reeve, Nick Capra y Jackson Radiz eran principalmente amigos, aunque entre ellos tenían una relación bastante especial. No es lo que se diría una relación de amigos al uso como se suele entender, sobre todo si tenemos en cuenta que cuando les apetecía y no tenían pareja, se comían las pollas, quedaban para ver una porno y hacerse unas pajas o en celebraciones especiales como esta, estaban a punto de cumplir su sueño de follarse todos en una orgía.
Juntos se pegaron el fiestón del año. Tras las uvas se echaron unos bailes por los mejores locales de la ciudad y a eso de las cinco de la madrugada, más borrachos que una cuba, terminaron en la habitación del hotel quitándose la ropa, quedándose en gayumbos todos juntos compartiendo la misma cama. El inevitable roce de los cuerpos en tan estrecho espacio, fue lo que hizo el cariño. Tanta bebida, tanto tio guapo y cuerpazos de gym juntitos, empezaron a montar tienda de campaña uno tras otro y las manos comenzaron a tocar intimidad ajena.
Tras casi siete horas de fiesta y desenfreno, los tios todavía tenían energía para terminar la primera noche del año como se merecía, por todo lo alto. A las mamadas de polla y de culo le siguió una follada en la que Jackson y Tryp se convirtieron en las parejas de intercambio de Shawn y Nick, que se iban rotando para follarse los dos culos sin usar condón.
A los muy cabronazos, medio borrachos, se les iba la pinza y jodían como unos putos animales martilleando los culos como les venía en gana. Hasta sudando estaban reventándoles los agujeros hasta que finalmente soltaron toda la descarga de sus cojones. No hacía falta que nadie les felicitara el año nuevo, ya se felicitaron entre ellos a su manera, destrozando una línea de amistad que hasta entonces nunca habían cruzado. ¿Qué sería lo siguiente?
